tag:blogger.com,1999:blog-28915003259423246722024-03-05T22:39:02.005-08:00TirandO De FáBuLaSTodo Final Tuvo Un Comienzo...Erialehttp://www.blogger.com/profile/08862103447816375764noreply@blogger.comBlogger11125tag:blogger.com,1999:blog-2891500325942324672.post-78562310739781603902013-09-29T15:01:00.001-07:002013-09-29T15:01:52.417-07:00Capitulo XI "Hola, ¿Quién es?
<br />
<div class="MsoNormal" style="-ms-text-justify: inter-ideograph; margin: 0cm 0cm 10pt; text-align: justify;">
<span style="line-height: 115%;"><span style="font-family: Calibri;"><span style="mso-tab-count: 1;"> <span style="font-family: "Trebuchet MS", sans-serif;"> </span></span></span><span style="font-family: "Trebuchet MS", sans-serif;">El
palacio siguió y siguió creciendo. Princesa escondió su título de Tirana, y
sonreía y bailaba mucho, un montón. El sol lloraba todos los atardeceres porque
se perdía el espectáculo que sólo la luna disfrutaba.</span></span></div>
<div class="MsoNormal" style="-ms-text-justify: inter-ideograph; margin: 0cm 0cm 10pt; text-align: justify;">
<span style="line-height: 115%;"><span style="font-family: "Trebuchet MS", sans-serif;"><span style="mso-tab-count: 1;"> </span>Cuando
llegó el primer mes de los verdes, justo en el momento donde todo florecía,
apareció Él. Hada Madrina sólo podía ver la polvareda del camino de tan rápido
que trotaba. Era un Príncipe sencillo, que apenas traía joyas consigo. Él era
el máximo tesoro, el regalo más brillante de todos.</span></span></div>
<div class="MsoNormal" style="-ms-text-justify: inter-ideograph; margin: 0cm 0cm 10pt; text-align: justify;">
<span style="line-height: 115%;"><span style="font-family: "Trebuchet MS", sans-serif;"><span style="mso-tab-count: 1;"> </span>No
fue cosa fácil que la Princesa sucumbiera, bien recordaba los dolores de los
desamores, los sin sabores. Su torre, y la oscuridad…aunque borrosos, hay
recuerdos grabados en piedra.</span></span></div>
<div class="MsoNormal" style="-ms-text-justify: inter-ideograph; margin: 0cm 0cm 10pt; text-align: justify;">
<span style="line-height: 115%;"><span style="font-family: "Trebuchet MS", sans-serif;"><span style="mso-tab-count: 1;"> </span>Príncipe
tuvo mucha paciencia. Bailaba cada noche que ella lo hacía para acompasar sus
latiros a cada danza real. Quería dejar claro que aquél era su sitio. Aunque en
el fondo ya se sabía de memoria el compás, pero eso solo Él lo sabía. </span></span></div>
<div class="MsoNormal" style="-ms-text-justify: inter-ideograph; margin: 0cm 0cm 10pt; text-align: justify;">
<span style="line-height: 115%;"></span><span style="line-height: 115%;"><span style="font-family: "Trebuchet MS", sans-serif;"><span style="mso-tab-count: 1;"> </span>Hada
los espiaba las noches pares, asombrada de ver sólo uno, aunque separados por
aquellos muros. Princesa apenas se dejaba ver, no sabía muy bien si por el
miedo escénico o por el deseo de hacerse valer.</span></span></div>
<div class="MsoNormal" style="-ms-text-justify: inter-ideograph; margin: 0cm 0cm 10pt; text-align: justify;">
<span style="line-height: 115%;"></span><span style="line-height: 115%;"><span style="font-family: "Trebuchet MS", sans-serif;"><span style="mso-tab-count: 1;"> </span>Pero
nuestro Príncipe continuó su andanza por el castillo, se ganó cada rincón, cada
mota de magia, a nuestra Hada le cambió el ron por el zumo de naranja. Nadie
veía más allá de sus buenas intenciones, nadie se dio cuenta de que se conocía
cada rincón del reino a pesar de ser un recién llegado.</span></span></div>
<div class="MsoNormal" style="-ms-text-justify: inter-ideograph; margin: 0cm 0cm 10pt; text-align: justify;">
<span style="line-height: 115%;"><span style="font-family: "Trebuchet MS", sans-serif;"><span style="mso-tab-count: 1;"> </span>Eran
muchos los gestos de conquista, las atenciones, las sorpresas…y poco a poco los
ojos de Princesa tornaron en un brillo especial. Princesa había abandonado sus
durezas, sus vestidos eran mucho más livianos y cada día se atrevía a mirar
desde el jardín hacia la ventana de nuestro Príncipe. Notaba sus tierras
diferentes, porque ya no sólo eran de ella, eran de los dos.</span></span></div>
<div class="MsoNormal" style="-ms-text-justify: inter-ideograph; margin: 0cm 0cm 10pt; text-align: justify;">
<a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEiLnkat06ViOdHGhgRUMEbJ63mxZ_XBB3tHoJrrF000kyy6LRtiBWZlkX4Aee9yGtlhmaZnzEAzW_vi185JKWCHZB7XOoe4NoSVpKpL6Qrw8EzMlVL53Ra611FOncJoJNl7HBgS2JjhDSyR/s1600/principes_princesas.gif" imageanchor="1" style="clear: right; float: right; margin-bottom: 1em; margin-left: 1em;"><img border="0" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEiLnkat06ViOdHGhgRUMEbJ63mxZ_XBB3tHoJrrF000kyy6LRtiBWZlkX4Aee9yGtlhmaZnzEAzW_vi185JKWCHZB7XOoe4NoSVpKpL6Qrw8EzMlVL53Ra611FOncJoJNl7HBgS2JjhDSyR/s1600/principes_princesas.gif" /></a><span style="line-height: 115%;"><span style="font-family: "Trebuchet MS", sans-serif;"><span style="mso-tab-count: 1;"> </span>Y
llegó la noche, aquella noche en la que la luna se había quedado dormida y sólo
quedaba la luz de las luciérnagas. Llegó la noche en la que Princesa no cerró
la puerta de su alcoba. No sólo no cerró la puerta, sino que entonó una melodía
que sólo Él pudo comprender, quien raudo se lanzó a los pasillos para poder
encontrarla.</span></span></div>
<div class="MsoNormal" style="-ms-text-justify: inter-ideograph; margin: 0cm 0cm 10pt; text-align: justify;">
<span style="line-height: 115%;"><span style="font-family: "Trebuchet MS", sans-serif;"><span style="mso-tab-count: 1;"> </span>Sólo
fue necesaria una mirada, un roce cuerpo a cuerpo…Tiernamente Príncipe tocó el
rostro de nuestra Tirana y limpió la primera lágrima de muchas mientras
susurraba…”Mi querida Princesa Tirana…ahora mi trinchera y la tuya, son la
misma trinchera”.<o:p></o:p></span></span></div>
Erialehttp://www.blogger.com/profile/08862103447816375764noreply@blogger.com1tag:blogger.com,1999:blog-2891500325942324672.post-30767887395363386382012-02-26T13:25:00.000-08:002012-02-26T13:25:03.887-08:00Capítulo X "Nuevos segundos comienzos"<div class="separator" style="clear: both; text-align: center;"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEiKF0Jz3U7zVIELVPZvOv0BzjqyAg5jyQItU1QxRmFMOqISeeszyXrMoqbyHof3Tlxbcbm04j4L_9Vgw3NJwJ4y8D-oLLs2cSVqMwC6kXd0xLyqUtkrwLYE3qj66KGjo-ONGwpu2LJ63gW8/s1600/1221658909222_f.jpg" imageanchor="1" style="clear: left; float: left; margin-bottom: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" height="320" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEiKF0Jz3U7zVIELVPZvOv0BzjqyAg5jyQItU1QxRmFMOqISeeszyXrMoqbyHof3Tlxbcbm04j4L_9Vgw3NJwJ4y8D-oLLs2cSVqMwC6kXd0xLyqUtkrwLYE3qj66KGjo-ONGwpu2LJ63gW8/s320/1221658909222_f.jpg" width="269" /></a></div>Hace mucho, mucho tiempo, se cuenta que una Princesa volvió a su reino vacío tras un largo tiempo desaparecida.<div><br />
</div><div>Se cuenta que lo primero que hizo fue buscar su perdida corona, y colocarla sobre su cabeza, aún teniendo el cuerpo completamente desnudo.</div><div><br />
</div><div>Cuentan también que comenzó a bailar al ritmo de una música que nadie escuchaba, solamente sonaba por y para ella. Decían que ni siquiera abría los ojos mientras cambiaba de habitación. Conocía cada esquina, cada baldosa rota...Nada pudo parar la danza de la Princesa.</div><div><br />
</div><div>Una vez terminado el extraño ritual, comentan que entró en juego la magia. Su Hada Madrina utilizó las bolas de polvo, los maderos rotos y la inquieta imaginación de la Princesa para crear. Poco a poco cada espacio se iba llenando de vida. Los recién nacidos iban llenando cada estancia, riendo y bailando sin parar.</div><div><br />
</div><div>Princesa estaba sentada en el suelo, simplemente sonriendo y moviendo rítmicamente su cuerpo en señal de aprobación. icen que un reguero de sudor caía por las sienes de Hada, y que un surco de miedo traspasaba sus ojos claros. Era evidente que Hada estaba asustada, pero nadie sabía de qué. </div><div><br />
</div><div>En un par de días, cuentan las bocas que el reino estaba en ebullición. Seres de toda calaña se afanaban en dar vida a todo lo que había muerto. Hasta lo cambiaron de nombre, e incluso lograron que muchos, quizá demasiados, olvidaran quién y qué era aquella Princesa.</div><div><br />
</div><div>Tirana se acurruca en su nuevo abrigo de lana y se deja cegar por el tímido sol que parece volver arrepentido.</div><div><br />
</div><div>Dicen que entonces, fue momento de continuar la historia, para poder darle final...Sin tener ninguna prisa para ello.</div><div><br />
</div><div><br />
</div>Erialehttp://www.blogger.com/profile/08862103447816375764noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-2891500325942324672.post-86404764302303690452012-01-19T11:15:00.000-08:002012-01-19T11:15:39.214-08:00Capítulo IX "Todo resurge, con o sin cenizas"Comenzó a llover. Era una lluvia extraña, seca, pegajosa. Princesa se desperezó y contuvo la respiración. Notó su piel manchada y magullada, el pelo caía amargo sobre su cara. Llegó la hora de despertar.<br />
<br />
Entonces gritó, gritó como nunca antes lo había hecho, desde bien dentro. El bosque devolvió su eco y se unió al momento. El viento movió las ramas cercanas empujando a Princesa. Un nuevo tiempo llegaba, todo aquél que tuviera alma podría sentirlo.<br />
<br />
Nuestra pequeña comenzó a correr por el bosque muerto. Las ramas arañaban su cuerpo y las hojas secas se pegaban sobre su sucia piel. Las heridas, lejos de apaciguarle, hinchaban aún más su furia reencontrada. Aspiraba cada sentimiento olvidado, cada recuerdo liberado. Si, era capaz de sentir, pero nadie dijo nunca que eso fuera algo bueno, al menos para los demás.<br />
<br />
Princesa volvía a ser Tirana, y más Tirana que nunca, ciega por todo lo que no veía y con una sola determinación. Todo sería suyo, brillante, sin importar el precio ni las artimañas. Sonrió al pensar que, con su historia, las reinas malas de los cuentos parecerían tiernas e inofensivas.<br />
<br />
<a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEhQlxX1C4l9hyphenhyphenhvvIka4mKhiZq-1aFPkx1zNWtR1J7uK_SW6_7GmIaHUBezVNKzXAmGVAbEcf8Id4RG0cY58YErxzrC5fXdAuI0x_6xOVT6T4FKEg_letcgWo79S5vLQhM29eR_Wc8s2Cr8/s1600/396043_234292099981267_108696225874189_522368_1854300889_n.jpg" imageanchor="1" style="clear: right; float: right; margin-bottom: 1em; margin-left: 1em;"><img border="0" height="265" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEhQlxX1C4l9hyphenhyphenhvvIka4mKhiZq-1aFPkx1zNWtR1J7uK_SW6_7GmIaHUBezVNKzXAmGVAbEcf8Id4RG0cY58YErxzrC5fXdAuI0x_6xOVT6T4FKEg_letcgWo79S5vLQhM29eR_Wc8s2Cr8/s400/396043_234292099981267_108696225874189_522368_1854300889_n.jpg" width="400" /></a>Se detuvo frente a su querida muralla. Resopló y comenzó el ascenso con rapidez. Nada podría detenerla. Como una lagartija, ni el sudor ni las piedras sueltas suponían un problema. El castillo y Tirana volvían a ser uno.<br />
<br />
Sus pies desnudos tocaron el suelo de la torreta y un escalofrío recorrió el cuerpo de Princesa, que rió mientras miraba los rasguños de sus manos. Se sacudió las motas de barro de sus hombros desnudos y comenzó a caminar.<br />
<br />
<br />
"Hada, querida magia tan mía...¿dónde te ha dejado caer esta vez tu amado ron?"<br />
<br />
Hada sintió cómo se tensaban partes de su cuerpo que no sabía que existían. Revoloteó inquieta siguiendo la voz de su Princesa.<br />
<br />
Aún diferentes, comenzaba el segundo asalto.Erialehttp://www.blogger.com/profile/08862103447816375764noreply@blogger.com2tag:blogger.com,1999:blog-2891500325942324672.post-74189126984181566062011-10-13T10:08:00.000-07:002011-10-13T10:39:40.276-07:00Capítulo VIII "La Tirana que no siempre quiso ser Tirana"Princesa llegó a la trinchera. Ese claro del bosque no tenía maleza. Todo estaba limpio, todo por lo que había abandonado su gran castillo...En la hoguera aún quedaban brasas rojizas. Todo estaba limpio, pero vacío.<br />
<div class="separator" style="clear: both; text-align: center;"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEi_5fzLdDd8M7MYbDI5pgndMRdixg302ZDzfo3o0gb9VE5a5nf0_DmOGtsqVB9MRJIaBDjvQ2-fHYpYCWmiDP5A8w0hrzEfECz6v_gN3C2hf9rdUTg8gBN0PXgMBMiyqnCzk1OdgTlPzkXh/s1600/002-dibujos-victoria-frances%255B1%255D.jpg" imageanchor="1" style="clear: left; float: left; margin-bottom: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" height="320" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEi_5fzLdDd8M7MYbDI5pgndMRdixg302ZDzfo3o0gb9VE5a5nf0_DmOGtsqVB9MRJIaBDjvQ2-fHYpYCWmiDP5A8w0hrzEfECz6v_gN3C2hf9rdUTg8gBN0PXgMBMiyqnCzk1OdgTlPzkXh/s320/002-dibujos-victoria-frances%255B1%255D.jpg" width="206" /></a></div>Arrodillada, pasó sus manos por la arena pisoteada. Un extraño que había anidado en su reino. No por mucho tiempo, pero había logrado cuidarlo mucho mejor que ella.<br />
Cansada se dejó caer en el improvisado jergón de paja. Estaba caliente, su esencia continuaba allí. Respiró todo lo hondo que pudo para meterlo dentro de ella, pensó que así nunca la abandonaría. Aunque fuera mentira y ya se hubiera marchado.<br />
Encogió su cuerpecito inerte esperando un abrazo que ya no llegaría. Sonrió para alguien que ya nunca la vería. Gritó pidiendo ayuda cuando ya nadie podía escucharla. Como siempre, nuestra princesa iba cuatro lunas tarde.<br />
Pero de pronto, ocurrió. Princesa comenzó a soñar. Se durmió sintiendo todo lo que se le había escapado. Tras muchas noches perdidas, volvió a soñar.<br />
Estaba en su jardín y las flores tarareaban a su paso. Caminaba sin prisa, y notaba la hierba fresca entre los dedos de sus pies. Podía sentir una suave brisa que hacía ondear sus cabellos. El sol besaba su piel a cada rato. Y ella sonreía.<br />
Su mirada buscaba algo. Sin ansias y angustias, pues sabía que tarde o temprano lo encontraría. Se sentía esperada. Y así era.<br />
Entonces le vio. La devolvía la sonrisa con los ojos...con los ojos! La tomó de la mano y comenzó a caminar a su lado. No forzó, no exigió, sólo la acompañaba en su paseo. Princesa era feliz, sin necesidad de comprender nada.<br />
No sentía peso sobre sus hombros, ni rabia al respirar...Era como no ser ella, siéndolo.<br />
Un sueño absurdo, y corto. demasiado corto.<br />
Tirana vuelve a abrir los ojos, pero no ve nada. El día continua en el reino del eterno invierno. La trinchera está vacíaErialehttp://www.blogger.com/profile/08862103447816375764noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-2891500325942324672.post-87734446063731250652011-09-28T11:03:00.000-07:002011-09-28T11:03:58.459-07:00Capítulo VII "Las apariencias engañan"<span class="Apple-style-span" style="font-family: Arial, Helvetica, sans-serif;">Observaba su respiración constantemente. Se mantenía alerta ante cualquier cambio, por imperceptible que fuera. De todos modos ella, al principio, ni siquiera quería respirar.</span><br />
<span class="Apple-style-span" style="font-family: Arial, Helvetica, sans-serif;">La tocaba durante horas, cada centímetro de su piel, con la mayor sutileza que conocía. Sin segundas intenciones. Ella, al principio, ni siquiera era consciente de que él estaba allí.</span><br />
<span class="Apple-style-span" style="font-family: Arial, Helvetica, sans-serif;">Poco a poco limpió su cuerpo sucio. Los restos del barro y flores muertas fueron desapareciendo. Era una ardua tarea aunque ella, al principio, ni siquiera recordaba que estaba desnuda. </span><br />
<span class="Apple-style-span" style="font-family: Arial, Helvetica, sans-serif;">Él mantenía el calor de la hoguera sin descanso, aún sin dormir y corriendo entre los árboles para coger la leña. A pesar de todo ella, al principio, ni siquiera notaba el aire caliente.</span><br />
<span class="Apple-style-span" style="font-family: Arial, Helvetica, sans-serif;">Hasta que se despertó. Él estaba allí, a su lado. Y sonreía, simplemente sonreía. Dejó una pequeña distancia de seguridad. Sabía muy bien todo lo que Princesa había destruido.</span><br />
<span class="Apple-style-span" style="font-family: Arial, Helvetica, sans-serif;">Princesa lo miró curiosa y asustada. A pesar de ser ella la que estaba allí, él no se inmutó. No salió corriendo ni la maldijo. Simplemente estaba ahí, sin atacar ni defenderse.</span><br />
<span class="Apple-style-span" style="font-family: Arial, Helvetica, sans-serif;"><br />
</span><br />
<span class="Apple-style-span" style="font-family: Arial, Helvetica, sans-serif;">Entonces ella se miró las manos, y vio que tenían un ligero tono rosado. Ya no era gris.</span><br />
<span class="Apple-style-span" style="font-family: Arial, Helvetica, sans-serif;"><br />
</span><br />
<span class="Apple-style-span" style="font-family: Arial, Helvetica, sans-serif;">Entonces ella se tocó el corazón, y sintió que había cogido un compás que nunca creyó merecer.</span><br />
<span class="Apple-style-span" style="font-family: Arial, Helvetica, sans-serif;"><br />
</span><br />
<span class="Apple-style-span" style="font-family: Arial, Helvetica, sans-serif;">Entonces notó sus lágrimas, que brotaban ansiosas de unos ojos que hacía tiempo se habían abandonado.</span><br />
<span class="Apple-style-span" style="font-family: Arial, Helvetica, sans-serif;"><br />
</span><br />
<span class="Apple-style-span" style="font-family: Arial, Helvetica, sans-serif;">Entonces supo todo lo que no quería saber. Supo que las cosas de dos daban color, y que no eran ninguna condena. Supo...y al saber se equivocó.</span><br />
<span class="Apple-style-span" style="font-family: Arial, Helvetica, sans-serif;"><br />
</span><br />
<span class="Apple-style-span" style="font-family: Arial, Helvetica, sans-serif;">Entonces se asustó. Miró a su alrededor histérica, pero no vio nada que poder ofrecer. Nada que la hiciera merecer. Se equivocó.</span><br />
<span class="Apple-style-span" style="font-family: Arial, Helvetica, sans-serif;"><br />
</span><br />
<span class="Apple-style-span" style="font-family: Arial, Helvetica, sans-serif;">Entonces quiso abrazarlo pero echó a correr. Mientras lo hacía, sintió como el gris volvía a apoderarse de todo. Las ramas de su bosque volvían a arañar su cara. </span><br />
<span class="Apple-style-span" style="font-family: Arial, Helvetica, sans-serif;"><br />
</span><br />
<span class="Apple-style-span" style="font-family: Arial, Helvetica, sans-serif;">Y se dio cuenta entonces, sólo entonces, de que todo lo bonito lo había creado él. Pero ella lo había roto.</span><br />
<span class="Apple-style-span" style="font-family: Arial, Helvetica, sans-serif;"><br />
</span><br />
<span class="Apple-style-span" style="font-family: Arial, Helvetica, sans-serif;">Hace frío, cae el otoño, y la Tirana nunca tendrá remedio.</span>Erialehttp://www.blogger.com/profile/08862103447816375764noreply@blogger.com1tag:blogger.com,1999:blog-2891500325942324672.post-25584683469350341042011-05-05T12:08:00.000-07:002011-05-05T12:10:29.193-07:00Capítulo VI "El doble juego de la intensidad"<div style="margin-bottom: 0px; margin-left: 0px; margin-right: 0px; margin-top: 0px;">Sus pasos llevaban rato sangrando. En aquél mundo gris, el color de su sangre era lo más hermoso. Princesa no sabe por qué camina, pero tampoco tiene ningún motivo para no hacerlo. No se siente desesperada, ni confusa.</div><div style="margin-bottom: 0px; margin-left: 0px; margin-right: 0px; margin-top: 0px;"><br />
</div><div style="margin-bottom: 0px; margin-left: 0px; margin-right: 0px; margin-top: 0px;">Siente, pero no sabe el qué.</div><div style="margin-bottom: 0px; margin-left: 0px; margin-right: 0px; margin-top: 0px;"><br />
</div><div style="margin-bottom: 0px; margin-left: 0px; margin-right: 0px; margin-top: 0px;">Todo su feo mundo la rodea. Las tierras que pertenecen a su nombre, ahora abandonadas y frías. Porque ella un día lo quiso así.</div><div style="margin-bottom: 0px; margin-left: 0px; margin-right: 0px; margin-top: 0px;"><br />
</div><div style="margin-bottom: 0px; margin-left: 0px; margin-right: 0px; margin-top: 0px;">En su camino graba cada detalle en las retinas. Aún siendo todo suyo, no lo reconoce. Tampoco echa nada en falta. Es curioso, podría reír y llorar a la vez, porque no entiende nada.</div><div style="margin-bottom: 0px; margin-left: 0px; margin-right: 0px; margin-top: 0px;"><br />
</div><div style="margin-bottom: 0px; margin-left: 0px; margin-right: 0px; margin-top: 0px;">Está vacía y llena, caliente y fría, oscura y luminosa. Es todo, y en el mismo momento no es nada. Grita y silencia, todo en una complicada armonía.</div><div style="margin-bottom: 0px; margin-left: 0px; margin-right: 0px; margin-top: 0px;"><br />
</div><div style="margin-bottom: 0px; margin-left: 0px; margin-right: 0px; margin-top: 0px;"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEj2CGARkvYhQtYO0lLvfpjCiYvNvcCEkDAOuiXTBTzRrjTYgS04RIq2HWRLLfB-f-P1OjwlJorsi3w_2l8YiLaOCgRtdW_nKVZnNQKCnsEvoJ8BQPhuPotDgkhyphenhyphen3hANlRejYWRrdaiEwqBO/s1600/042VictoriaFrances.jpg" imageanchor="1" style="clear: right; float: right; margin-bottom: 1em; margin-left: 1em;"><img border="0" height="200" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEj2CGARkvYhQtYO0lLvfpjCiYvNvcCEkDAOuiXTBTzRrjTYgS04RIq2HWRLLfB-f-P1OjwlJorsi3w_2l8YiLaOCgRtdW_nKVZnNQKCnsEvoJ8BQPhuPotDgkhyphenhyphen3hANlRejYWRrdaiEwqBO/s200/042VictoriaFrances.jpg" width="126" /></a>Quiere morir mientras respira más profundo que nunca. Quiere olvidar mientras se baña en sus recuerdos. Quiere fingir mientras cada latido es más real que el anterior.</div><div style="margin-bottom: 0px; margin-left: 0px; margin-right: 0px; margin-top: 0px;"><br />
</div><div style="margin-bottom: 0px; margin-left: 0px; margin-right: 0px; margin-top: 0px;">Paranoia de su cordura, terca con su docilidad, minuciosa en su dejadez. Hace rato que perdió su ropa, pero nunca se ha notado tan vestida.</div><div style="margin-bottom: 0px; margin-left: 0px; margin-right: 0px; margin-top: 0px;"><br />
</div><div style="margin-bottom: 0px; margin-left: 0px; margin-right: 0px; margin-top: 0px;">Un grito lo rompe todo. Lo destroza...no deja nada a su paso.</div><div style="margin-bottom: 0px; margin-left: 0px; margin-right: 0px; margin-top: 0px;"><br />
</div><div style="margin-bottom: 0px; margin-left: 0px; margin-right: 0px; margin-top: 0px;">Nuestra Princesa Tirana se ha convertido en intensidad. La pureza de lo bueno y lo malo a la misma vez, en todo su esplendor.</div><div style="margin-bottom: 0px; margin-left: 0px; margin-right: 0px; margin-top: 0px;"><br />
</div><div style="margin-bottom: 0px; margin-left: 0px; margin-right: 0px; margin-top: 0px;">Es sin ser, será sin tener un fue.</div><div style="margin-bottom: 0px; margin-left: 0px; margin-right: 0px; margin-top: 0px;"><br />
</div>Erialehttp://www.blogger.com/profile/08862103447816375764noreply@blogger.com1tag:blogger.com,1999:blog-2891500325942324672.post-4556939332211687482010-05-12T14:06:00.000-07:002010-05-15T07:59:29.366-07:00Capítulo V "La Cadencia"Nadie le había enseñado a volar, pero como era una princesa, no tuvo demasiado problema.<br />
No podía ver porque la niebla de su desencanto era demasiado espesa. Pero ella era más consciente que nunca de Ella misma.<br />
Sentía cada poro, cada lunar, cada grieta de la piel. Sentía y no podía parar de hacerlo, cada vez más adentro.<br />
Comprendió entonces que estaba repleta. En cada rincón, una muesca. A pesar de su negación constante todo permanecía allí. En eterna espera.<br />
Encontró sonrisas que pensó que nunca existieron. Se topó con emociones a las que no sabía dar nombre. Todo el Olvido estaba en ella.<br />
Los recuerdos florecían en su piel, las sensaciones...y aquello que era normal...la respiración constante y pausada. Volvía a tener su banda sonora. El corazón, aún doblado y enmohecido, palpitaba en alguna parte.<br />
Todo tan confuso y como siempre tan irritante...tan devastador como hermoso. Princesa estaba renaciendo, o al menos, lo estaba intentando. Vió en sus brazos el polvo, tocó en su pelo la tristeza y olió la soberbia en su propio aroma.<br />
En su descenso tocaba la piedra de la que fue su muralla. Tan tensa y grimosa...Se asustó de su propio cobijo, ahora ajeno y peligroso. Por un momento, olvidó que es por su defensa por quien queda a la intemperie. <br />
<div style="border-bottom: medium none; border-left: medium none; border-right: medium none; border-top: medium none;"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEhuFbFDltbR3YwX0nXRrB2Jf2VsTkuTNSjh-NC_UdSJ5hSWIXryppMKhXJXJhxqBctBpRXSlss1Jum03suVBDj2kdhtaPA5ir3S3dpk8vXoxgo-68gpnd2Zu6N_kGcQ7B6poKQStSbTQR4q/s1600/239019_gpizp1an88f8ravekax34ur825nmbl_1_h004405_l.jpg" imageanchor="1" style="clear: right; cssfloat: right; float: right; margin-bottom: 1em; margin-left: 1em;"><img border="0" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEhuFbFDltbR3YwX0nXRrB2Jf2VsTkuTNSjh-NC_UdSJ5hSWIXryppMKhXJXJhxqBctBpRXSlss1Jum03suVBDj2kdhtaPA5ir3S3dpk8vXoxgo-68gpnd2Zu6N_kGcQ7B6poKQStSbTQR4q/s320/239019_gpizp1an88f8ravekax34ur825nmbl_1_h004405_l.jpg" wt="true" /></a>En el suelo no queda apenas nada. Es el imperio de su perenne invierno. Al fondo, una pequeña rosa grisácia tiembla antes su presencia. Princesa no ha dejado de ser Princesa, pero percibe lo que un día fue belleza y lo quiere para ella.</div><div style="border-bottom: medium none; border-left: medium none; border-right: medium none; border-top: medium none;">Al sostenerla entre sus manos Rosa grita y muere en un instante. Princesa había olvidado su letalidad. Y se rompe, se encoge...No es el muro...¡Es ella!</div><div style="border-bottom: medium none; border-left: medium none; border-right: medium none; border-top: medium none;">Comienza el camino en silencio, anda sabiendo que no hay nada al final que la espere. Su castillo queda atrás, se dejó las llaves colgando en la puerta...</div><div style="border-bottom: medium none; border-left: medium none; border-right: medium none; border-top: medium none;">La risa continua desde la trinchera, la hora va llegando...</div><div style="border-bottom: medium none; border-left: medium none; border-right: medium none; border-top: medium none;"><br />
</div><div style="border-bottom: medium none; border-left: medium none; border-right: medium none; border-top: medium none;">Muy lenta.</div>Erialehttp://www.blogger.com/profile/08862103447816375764noreply@blogger.com2tag:blogger.com,1999:blog-2891500325942324672.post-29354472507907275152010-04-19T12:47:00.000-07:002010-04-19T12:47:16.048-07:00Capítulo IV "Desencuentros"La trinchera permanecía y permanecía a unos metros del castillo. He perdido la cuenta de las lunas que ha visto nacer, vivir y morir. Parece que estuvo ahí siempre.<br />
Pero nuestra princesa sabía que no. Desde la ventana no podía ver quién o qué cosa le acechaba, y eso hacía que fuera una irritación andante. Recorría como un león enjaulado su ya derrotado dormitorio. Su vestido iba rajándose con cada esquina. En realidad, nuestra Princesa había perdido casi todo su valor... ni los harapos la quedaban. Pero aún no se daba cuenta. O no del todo.<br />
<br />
Intentó distraerse con lo que quedaba...pero, ¿qué quedaba? Ella misma, sólo ella y sus circunstancias, si es que las hay. Nadie impuso la soledad, nadie forzó el silencio. <br />
Fue Ella, de golpe y con premeditación, decidió que las cosas no merecían la pena. <br />
<br />
Hada se dió al ron seco de las bodegas. No soportaba el placer del dolor al autoencadenarse. No alcanzaba a comprender cómo su Princesa había olvidado que su cuerpo no sólo sirve para agonizar. Las polillas habían dado buena cuenta de sus alas, que resquebrajadas, sólo dejaban un polvo sucio a su paso. Era el único reflejo que quedaba de que por allí, un día, hubo magia.<br />
Las alitas corrieron hasta la ventana. Hada hipea y menea la cabeza..."Sólo otra mente atormentada podría soportar este sol helado..."<br />
<br />
Desde la Trinchera, la mente ajena se mantenía fuerte y concentrada. El pequeño fuego crepitaba constantemente. Alimentado de orgullo, nada detendría su camino. <br />
<br />
Era consciente de su propia desesperación, pero no perdería los nervios, los impulsos están prohibidos en esta batalla.<br />
La guerra más absurda de todas, pues había comenzado ya perdida. Ya estaba herido de muerte cuando comenzó el camino. Derrotado, ¿qué queda por perder?<br />
Nadie le haría sombra...Si estaba allí, es porque nadie le haría sombra nunca...<br />
<br />
<a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEi1lCnLWaUOoKdP1lPLn8u_lBdgA6jsSKlf5ZZxtiCjSzS7rXsZ3mXuiO1d-YTBcEST2q3NkoGZJwa2J4p754BE3FKAs3GVjAjkwr-2-rCffJIceufPgzsXAJB4-8RMHGGiNh9B96-hi23s/s1600/6f01.jpg" imageanchor="1" style="clear: right; cssfloat: right; float: right; margin-bottom: 1em; margin-left: 1em;"><img border="0" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEi1lCnLWaUOoKdP1lPLn8u_lBdgA6jsSKlf5ZZxtiCjSzS7rXsZ3mXuiO1d-YTBcEST2q3NkoGZJwa2J4p754BE3FKAs3GVjAjkwr-2-rCffJIceufPgzsXAJB4-8RMHGGiNh9B96-hi23s/s320/6f01.jpg" wt="true" /></a><br />
<div style="border-bottom: medium none; border-left: medium none; border-right: medium none; border-top: medium none;"><br />
</div><div style="border-bottom: medium none; border-left: medium none; border-right: medium none; border-top: medium none;">En la torre ondea un cabello que no es sedoso, ni brillante. Princesa tose al sentir el aire entrando en sus pulmones. La furia se ha hecho con su cuerpo...No lo soporta. La impotencia se clava tan profundo que no puede evitar chillar. La voz que murió destroza unos oídos sordos...El barranco que sus sollozos han construido desciende bajo ella. </div><div style="border-bottom: medium none; border-left: medium none; border-right: medium none; border-top: medium none;"><br />
</div><div style="border-bottom: medium none; border-left: medium none; border-right: medium none; border-top: medium none;">Hada trata de llegar con sus desaires alcohólicos hasta su Niña...."¿Qué pretendes hacer, Pequeño Desastre?"</div><div style="border-bottom: medium none; border-left: medium none; border-right: medium none; border-top: medium none;">"No consiento que nadie me desafíe...Es mi Reino...No consiento que nadie me haga sombra..."</div>Hada sólo logró apenas susurrar..."No lo hagas..."<br />
Pero ya era demasiado tarde. El aire respondió...."Hace tanto frío Hada..."<br />
<br />
Desde la Trinchera alguien ríe a carcajadas. Llegó la Hora.Erialehttp://www.blogger.com/profile/08862103447816375764noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-2891500325942324672.post-30765899100782142902010-04-19T12:38:00.000-07:002010-04-19T12:38:30.368-07:00Capítulo III "Poco queda por lo que luchar..La Tirana..."Todo ha quedado atrás. Nuestra Princesa no llora, es íntima del silencio.<br />
En su última rabieta echó a todo el mundo de su castillo. Desde la criada más eficaz hasta el gato que nunca cazó un solo ratón.<br />
Ya no necesita a nadie, ya no quiere encontrar. No tiene hambre, ni sueño, no siente nada.<br />
Las arañas han convertido el palacio en su gran mansión. Ya nada importa.<br />
<br />
El invierno se acerca por las laderas, lento y pausado, sin descanso. La princesa ya no mira, qué más da.<br />
A veces se intuye una chispa en sus pupilas. No os emocioneis, es tan breve como sus suspiros.<br />
<div class="separator" style="border-bottom: medium none; border-left: medium none; border-right: medium none; border-top: medium none; clear: both; text-align: center;"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEgYADU8CoPn15zn__4TcML6OAuYsClw0c_UXuYr86NN7f7dXb5dVUsjpEFQhAjN4YlnNi-hK6otK4H0ArOGiulRwexios7Tw6ex-bLYaVV7VqSduLzaSs-980pJC0BqDQ-ledxOHXM1x6xp/s1600/tirana.jpg" imageanchor="1" style="clear: right; cssfloat: right; float: right; margin-bottom: 1em; margin-left: 1em;"><img border="0" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEgYADU8CoPn15zn__4TcML6OAuYsClw0c_UXuYr86NN7f7dXb5dVUsjpEFQhAjN4YlnNi-hK6otK4H0ArOGiulRwexios7Tw6ex-bLYaVV7VqSduLzaSs-980pJC0BqDQ-ledxOHXM1x6xp/s320/tirana.jpg" wt="true" /></a></div>Ella se siente fuerte, desde su cristal se ve bien. ¿Para qué más?<br />
<br />
De vez en cuando, niños ya adultos tiran piedras a sus ventanas. No sirve de nada, nuestra Princesa no oye.<br />
Los príncipes continuan llegando a sus tierras. Nadie sabe el por qué, pero ahí siguen. Las lechuzas les advierten: "No peleeis, así es todo mucho más sencillo. No lo conseguireis. Entre vuestra paciencia y su insistencia, hay una batalla perdida".<br />
Casi todos se marchan por inapetencia (o prudencia). <br />
Los menos, tratan de tirar una puerta atrancada a base de promesas y palabrería.<br />
En ese momento, las neuronas de la Princesa levantan en jaqueca, y ella grita una frase eternamente repetida "¡Marchate!No estoy hundida, no te creas mi salvavidas"<br />
Y se escucha el trote del caballo, se ha ido. Se siente un cierto alivio. Necesita estar sola. luego se apodera de ella un extraño sentimiento. No lo necesita, está sola...<br />
Y aquella idea hace que se sienta aún peor...Erialehttp://www.blogger.com/profile/08862103447816375764noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-2891500325942324672.post-79968660260476065442010-04-19T12:18:00.000-07:002010-04-19T12:18:18.875-07:00Capítulo II "Donde las Apariencias se quedan Pequeñas"Volviendo a la historia de nuestra princesita…tenemos mucho que contar!<br />
<br />
<br />
El hada madrina dejó muchas tareas a la pequeña. Ésta, extremadamente confusa y alterada, decidió hacer lo que mejor sabía hacer. Se acurrucó en su colchón de ilusiones ajenas y lloró. Provocó una espesa llovizna en el reino, estropeando las cosechas de la emoción y los árboles del esfuerzo.<br />
<br />
Al despertar de su desesperación y observar con atención el estropicio, decidió poner en práctica los consejos de la diminuta gruñona, pero no pensaba ensuciarse las manos… ¡odiaba las telarañas de la humildad!<br />
<br />
Colocó en fila a cada uno de sus sirvientes y les ordenó con voz firme y autoritaria: “Quiero que mi reino brille de pureza. No toleraré un solo rincón sin luz, ni una sola mosca de temor, ni una sola pelusa de odio. Éste será el castillo perfecto para vivir, y tendré que echar a los príncipes a patadas porque todos querrán deshacer mi cama”.<br />
<br />
Todos los vasallos se pusieron manos a la obra, no se sabe muy bien si por la fuerza del pánico o por el miedo a la rebelión, pero pronto todo el castillo estaba impoluto…toda la mierda quedó en los cajones.<br />
<br />
<div class="separator" style="clear: both; text-align: center;"><br />
</div><div class="separator" style="border-bottom: medium none; border-left: medium none; border-right: medium none; border-top: medium none; clear: both; text-align: center;"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEg0ox_K9V-VWUm6sqSNTWJIaFMgnE7dnI7WW9PffmyYBZoTCtPL05khCCDr0aw4Pd7vkkBDmyEnR94teCOENKXfNugH-z4Q_BMtfKRDV6m69wYfgrDEC6i5iD-6Fm9v1OB3OxU6RU2Y22tS/s1600/496371-i388_photobucket_com-albums-oo328-VampirecovernX_X-017VictoriaFrancesedit.jpg" imageanchor="1" style="clear: right; cssfloat: right; float: right; margin-bottom: 1em; margin-left: 1em;"><img border="0" height="320" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEg0ox_K9V-VWUm6sqSNTWJIaFMgnE7dnI7WW9PffmyYBZoTCtPL05khCCDr0aw4Pd7vkkBDmyEnR94teCOENKXfNugH-z4Q_BMtfKRDV6m69wYfgrDEC6i5iD-6Fm9v1OB3OxU6RU2Y22tS/s320/496371-i388_photobucket_com-albums-oo328-VampirecovernX_X-017VictoriaFrancesedit.jpg" width="320" wt="true" /></a></div>No tardaron los príncipes en hacer acto de presencia. Todos se sentían atraídos por aquél resplandor, acompañado siempre de una princesa altiva y peripuesta.<br />
<br />
Pero…al igual que llegaban, todos salían despavoridos dejando una intensa humareda de decepción.<br />
<br />
La princesa, tremendamente enfadada y roja de ira se interpuso en el veloz paso de uno de ellos, interrogándole con la mirada y pidiéndola explicaciones por su falta de cortesía.<br />
<br />
El jovencito rubio dejó caer sus bucles dorados a un lado, y con una intensa mirada respondió: “¿Acaso crees, muchacha, que tus sirvientes son limpiadores de conciencias? <br />
Tu rostro es amargo, y sin tus damas no eres capaz de dar un paso sin tropezar. ¿No te das cuenta de que esto es cosa tuya? No eres más que falsa apariencia, sólo has cubierto tu amargura con servidumbre, brillas porque los demás te limpian… ¡así no mereces la pena, princesa harapienta!”<br />
<br />
Dicho esto, el joven partió presuroso, con sus ilusiones a otra parte. Nuestra princesa pataleó, gritó y se manchó su vestido de pedrería…pero una vez más, se abandonó al llanto, que tanto cansa y tan poco aporta…<br />
<br />
Y aquí dejamos de nuevo a nuestra princesa, cegada por el miedo disfrazado de venganza, llorando temores teñidos de refunfuños, gritando al cielo que él tiene toda la culpa…echando los compromisos fuera, cargando de nuevo en otros lo que sólo ella puede curar…<br />
<br />
Continuará…Erialehttp://www.blogger.com/profile/08862103447816375764noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-2891500325942324672.post-38181359100963411502010-04-10T13:19:00.000-07:002010-04-19T12:18:49.776-07:00Capítulo I "Mi Princesa Tirana"<div class="separator" style="border-bottom: medium none; border-left: medium none; border-right: medium none; border-top: medium none; clear: both; text-align: center;"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEhaIm-5HiiROikkYti6nMTrzVUlZxIp7pubcqkKcxz3B8QrI_vaLlNx_UHPNRFMxKAVscjg8rWWnGw_59hODgrKfuO8hhP6KfUX41-vQkcBiCa4zDcOiERetNkjprZzzsgipIho7UvmCg5L/s1600/Princesa.jpg" imageanchor="1" style="clear: right; cssfloat: right; float: right; margin-bottom: 1em; margin-left: 1em;"><img border="0" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEhaIm-5HiiROikkYti6nMTrzVUlZxIp7pubcqkKcxz3B8QrI_vaLlNx_UHPNRFMxKAVscjg8rWWnGw_59hODgrKfuO8hhP6KfUX41-vQkcBiCa4zDcOiERetNkjprZzzsgipIho7UvmCg5L/s320/Princesa.jpg" wt="true" /></a></div><span style="font-family: Verdana, sans-serif;">Hace ya mucho, mucho tiempo, existía en el infinito un pequeño pero glorioso reino. Estaba habitado por una pequeña princesa que cada mañana lloraba amargamente. Ansiaba desesperadamente que un príncipe deseara reinar con ella, pero todos los pretendientes pasaban sin dejar huella, y cada día el vacío se hacía mas patente.</span><br />
<br />
<span style="font-family: Verdana, sans-serif;"></span><br />
<br />
<span style="font-family: Verdana, sans-serif;">Una mañana llegó la ya famosa Hada madrina, salvadora de todos los cuentos. Recorrió con enorme sigilo todo el palacio, y escudriñó cada sueño de los campesinos.Corrió en busca de la princesa, que no hallaba consuelo en sus lujosos caprichos. La diminuta libélula comenzó a revolotear a su alrededor mostrando un tremendo enfado:</span><span style="font-family: Verdana, sans-serif;"><br />
</span><br />
<span style="font-family: Verdana, sans-serif;"><br />
</span><br />
<span style="font-family: Verdana, sans-serif;">- ¿Y dices llorar porque no hay príncipe que te aguante?-</span><br />
<br />
<span style="font-family: Verdana, sans-serif;">- Necesito un compañero en el que apoyarme, que me guíe y me valore, que me haga sentir única- Contestó la princesa entre sollozos.</span><br />
<span style="font-family: Verdana, sans-serif;"><br />
</span><br />
<span style="font-family: Verdana, sans-serif;">- ¡Eres una estúpida!- gritó el puntito de luz con rabia- Tienes todas tus habitaciones cubiertas de polvo de desesperación, se acumulan en tu cocina las inseguridades, tu pueblo tiene miedo del miedo y tus aposentos son mares de dudas, ¿cómo pretendes encontrar a alguien que arregle este caos?-</span><br />
<br />
<span style="font-family: Verdana, sans-serif;"><br />
</span><br />
<span style="font-family: Verdana, sans-serif;">La princesa paró de llorar y miró a la diminuta Hada con rabia, ansiosa por escuchar aquello que nadie quiere oír.</span><span style="font-family: Verdana, sans-serif;"><br />
</span><br />
<span style="font-family: Verdana, sans-serif;"><br />
</span><br />
<div style="border-bottom: medium none; border-left: medium none; border-right: medium none; border-top: medium none;"><span style="font-family: Verdana, sans-serif;">- Saca fuera tu basura, cuida con mimo cada rincón, conoce cada recoveco. Ama a tu reino, te basta con eso. Quiérete porque quizás no hay un mañana...adórate porque tú siempre permaneces...y tal vez, un día, puedas hacerle el favor a alguien de cederle tu silla y permitirle acompañarte....-</span></div><div style="border-bottom: medium none; border-left: medium none; border-right: medium none; border-top: medium none;"><span style="font-family: Verdana, sans-serif;"><br />
</span></div><div style="border-bottom: medium none; border-left: medium none; border-right: medium none; border-top: medium none;"><span style="font-family: Verdana, sans-serif;"><br />
</span></div>Erialehttp://www.blogger.com/profile/08862103447816375764noreply@blogger.com0